Visitar Parque Europa fue el último plan que hicimos antes del confinamiento. El post ha estado en borrador desde entonces. Para los que vivís en la Comunidad de Madrid y en una zona sanitaria no confinada, es un buen plan para disfrutar con los peques: viajar con los niños por Europa, sin casi salir de casa.
Ir a Parque Europa, en Torrejón de Ardoz (Madrid) es uno de esos planes que tienes guardado en la recámara para cuando surja la ocasión. Y llegó el día: No hay nada como vivir en una Comunidad Autónoma que no sea la de Madrid, porque el calendario escolar suele tener fechas festivas diferentes, lo que nos permite disfrutar de Madrid y alrededores sin aglomeraciones, que ya sabemos que en Madrid hay gente para todo y en todas partes.
Elegimos ir el lunes de Carnaval. Donde vivimos, los niños no tenían cole y los mayores cogimos el día libre. Nuestro plan inicial era ir a la Quinta de los Molinos, en Madrid capital, para ver los almendros en flor, que es espectacular, pero no pudimos aparcar (¿a quién se le ocurre pensar que íbamos a poder aparcar en un barrio lleno de oficinas, donde no hay ORA y un lunes laborable? Pues a mí, que para eso soy optimista.)
Así que ante la imposibilidad de aparcar, decidimos cambiar de rumbo y nos fuimos a Torrejón. Yo ya conocía el Parque Europa, estuve hace muchos años y apenas lo recordaba.
El Parque Europa
El Parque Europa se inauguró en 2010. El terreno que ocupa hoy en día era una zona deprimida, un descampado sin ningún uso. Gracias a la intervención realizada, se ha recuperado una importante zona para la ciudad y además se ha conseguido una gran área verde, convirtiéndose en el pulmón de Torrejón.
El gran atractivo del parque es la reproducción a escala de 18 monumentos de capitales europeas, repartidos por todo el parque. Además, de los monumentos, a lo largo del recorrido te vas encontrando con kioscos y actividades (de pago), como por ejemplo, el tiro con arco, los ponies o la atracción estrella, que es la tirolina.
La visita
La entrada al parque es gratuita, sólo las atracciones que hay dentro son de pago. Por lo que vi en los carteles, son precios bastante asequibles. También hay una pequeña tienda de souvernirs.
El horario de apertura es bastante amplio. Nosotros fuimos en febrero y abrían a las 9 de la mañana y cerraban tarde. Os recomiendo consultar el horario en la web, porque evidentemente los horarios cambian en función de la estación del año.
Justo a la entrada del parque hay un cartel con un plano del parque que indica dónde se encuentran los monumentos, kioscos, zonas infantiles, atracciones,… Además, cada monumento tiene cerca un panel identificativo, con sus características y su situación.

Una escultura de las «Tres Gracias» de Rubens nos da la bienvenida al recinto. Nosotros entramos por la puerta donde está la Puerta de Alcalá y seguimos el itinerario hacia nuestra derecha, así que enseguida nos encontramos con dos monumentos típicos de Bruselas, el Manneken Pis (la escultura del niño meón belga) y el Atomium.
Siguiendo por ese camino a mano izquierda llegamos a la Fontana de Trevi. Curiosamente allí nos encontramos con un grupo de visitantes que estaban haciendo como si tirasen una moneda a la famosa fuente. Sin embargo, mis dos hijos mayores ya tenían puesta la mirada en otro monumento, la Torre Eiffel, de París.
Para ellos, tienen un gran significado y no porque hayan estado en París, precisamente. Los Reyes le trajeron al mayor un kit para construir la Torre Eiffel a escala. Además, el mayor había trabajado en el cole un proyecto sobre París y la identifica perfectamente. Como el pequeño guerrero es un fiel seguidor de todo lo que hace su hermano también conoce la Torre Eiffel.
Desde ahí tuvimos que deshacer parte del camino para seguir «viajando por Europa», los niños estaban muy motivados intentando descubrir qué era lo siguiente que íbamos a ver. Nos cruzamos con el «David«, de Miguel Ángel y un barco vikingo (decepcionante) Sin embargo, en medio de esta euforia nos topamos con una zona infantil, con columpios, toboganes, rocódromos,… la parada fue obligatoria.
Seguimos rumbo y llegamos a Londres y al Puente de la Torre, que está junto a la Sirenita, de Copenhague. Aquí lo que les llamó la atención era que el puente se podía cruzar y eso había que probarlo.
Londres está tan solo a unos pasos de Madrid y su Puerta del Sol y la Plaza Mayor. La Puerta del Sol está rodeada por edificios típicos de las plazas mayores españolas, con sus soportales, sus balconadas,… Aquí hay además un restaurante y unos aseos, parada técnica obligada.
Zona infantil Manneken Pis Atomium
Dejamos Madrid, para pasar junto a la Victoria de Samotracia y un teatro griego. De ahí, nos fuimos a Berlín, para ver la Puerta de Brandenburgo y un trozo real del muro (Hay otros tres trozos en el Parque de Berlín, de Madrid). Pos supuesto, también pasamos por debajo (no sé que tienen las puertas y los puentes que todo hay que cruzarlo). De Berlín, nos fuimos a Holanda, a ver los molinos de viento, que no tienen nada que ver con los manchegos, pero realizaban funciones similares.
Cruzamos el puente de Van Gogh. Lo han llamado así por el puente que Van Gogh ha representado en numerosas obras mientras vivía en Arlés (Francia). Apenas nos quedaba un monumento para terminar la visita cuando nos encontramos con otro área infantil. Así que volvimos a hacer un alto en el camino, para que desfogaran otro poquito (por si no habían andado/corrido lo sufiente por el parque).
Finalmente, acabamos la visita en la Torre de Belém en Lisboa. Desde ahí, tenemos una bonita perspectiva del Puente de la Torre y de la Puerta de Brandenburgo.
La visita, yendo tranquilamente, haciéndonos fotos y paradas técnicas, puede durar en torno a la hora u hora y media.
Parque Europa Puerta del Sol Puente de Londres
Mi opinión
Al Parque Europa, como a todos los parques, hay que ir sin prisa y más cuando vas con niños, que se cansan de ir de un lado para otro viendo monumentos.
El mejor momento del año es primavera y otoño, yo creo que en verano, aunque hay más horas de luz, puede llegar a ser un poco mortal. Sí que hay árboles y zonas cubiertas, pero la gran parte del recorrido no.
No tuvimos ocasión de probar ninguna de las atracciones que tienen, fuimos fuera de temporada, aunque igual ahora con el tema del coronavirus tampoco funcionan. Ni vimos la fuente cibernética, que también tiene un horario (nocturno, claro). Tampoco puedo deciros si los precios de los quioscos eran caros o no, porque no estaban abiertos.
Con independencia de esto, es muy buen plan para ir con niños. El parque es amplio, tiene zonas infantiles, zonas para descansar, hay bancos y papeleras por todas partes y está limpio.
Genial saber esta info, gracias!
Fuimos el año pasado y los parques infantiles estaban cerrados, si ya lograste entrar asumo que ya están nuevamente abiertos Gracias!
Bueno, teniendo en cuenta las restricciones por covid que puede haber, esta semana te los puedes encontrar abiertos y a la siguiente cerrados. Como parque público y de libre acceso que es, será el ayuntamiento quien determine si abren o cierran los parques infantiles. Donde yo vivo han estado cerrados 11 meses.